Confesión matutina.

Cuando apenas amanece,
y el alma todavía no ahorra enfados.
¿Para que esperar la noche?
Confieso que:
He cambiado un poco.
Ya no tiro pelotas al cielo;
Mantengo mis retratos en un cajón;
He quitado los botones a mis camisas
Y mis zapatos…
Bueno, mis zapatos continúan manchándose,
Pero ahora, ya se donde se pueden lavar.
Confieso que he cambiado un poco.
(antes que llegue la noche)

bukowski

Lo primero que la gente hace en una revuelta es correr y agarrar una tele en color. Quieren el mismo veneno que hace al enemigo un imbécil.

Charles Bukowski, Una conversación tranquila.

poemas de marcos ana español

Si salgo un día a la vida
mi casa no tendrá llaves:
siempre abierta, como el mar,
el sol y el aire.

Que entren la noche y el día,
y la lluvia azul, la tarde,
el rojo pan de la aurora;
la luna, mi dulce amante.

Que la amistad no detenga
sus pasos en mis umbrales,
ni la golondrina el vuelo,
ni el amor sus labios. Nadie

Mi casa y mi corazón
nunca cerrados: que pasen
los pájaros, los amigos,
el sol y el aire.


Mi corazón es patio

Mi vida
os la puedo contar en dos palabras:
Un patio
y un trocito de cielo donde a veces pasan
una nube perdida y algún pájaro
huyendo de sus alas.


¿Cómo es la vida?

Decidme cómo es un árbol.
Decidme el canto de un río
cuando se cubre de pájaros.

Habladme del mar. Habladme
del olor ancho del campo.
De las estrellas. Del aire.

Recitadme un horizonte
sin cerradura y sin llaves
como la choza de un pobre.

Decidme cómo es el beso
de una mujer. Dadme el nombre
del amor: no lo recuerdo.

(¿Aún las noches se perfuman
de enamorados con tiemblos
de pasión bajo la luna?

¿O sólo queda esta fosa,
la luz de una cerradura
y la canción de mis losas?)

22 años. Ya olvido
la dimensión de las cosas,
su color, su aroma… Escribo
a tientas: "El mar", "El campo"…

Digo "Bosque" y he perdido
la geometría del árbol.
Hablo por hablar de asuntos
que los años me borraron.

...

(No puedo seguir: escucho
los pasos del funcionario).

que importa

Tres por cuatro pies.
Tres filas de cuatro cuadros.
Esa es Mi ventana.
Se que no puedo ver con los dos ojos.
Pero, que mas da…
Es la misma.
Es lo mismo cuando hay tantas palabras que hablar, y no se escupe ninguna.
O lo mismo recordar a cinco ni;os cobijados de moscas y no poder ofrecerles una casa.
Da igual estar sentado o parado
Pensativo o llorando a lagrima viva al estilo poetico.
Que importa. que importa esto si el ninio de las monedas de chocolate
Aun vende por las calles de Guatemala.
Que importan estos papeles mojados de letras sin identidad.
Que importa cada vuelta que dan mis ojos hacia la ventana absurda.
Que será de aquel joven lleno de cenizas de alcohol, vagando en las calles de cancun
Con los pies rojinegros por la sangre y las marcas de la mugre.
Hay un suenio que hierve en la oscuridad.
Escalar el cipres latinoamericano.
Recibir los golpes del cansancio por dos o tres sonrisas.
Llorar monedas de esperanza mientras abrazo al ninio de chocolate.
Regalar girasoles a ancianas.
Escucharlas hasta quedar dormido.
Romper los cuatro por tres.
Las tres filas de cuatro cuadros.
Romper mi ventana.
Despertar al sol con el ansia de ayudar.
Comer mi hambre para saciar a otros.
Montar mi debilidad hasta que se resigne.
abrir mis ojos hasta que el canto de un ave los haga cerrar.
Latir hasta que no sienta mas.

bebes, espejos del alma

Al bebé dormido
A los que observan bebes dormidos…

Fingiendo un sueño,
suspiros lentos evoca tu viento.
Lleno estas de neblinas tranquilas,
dilatando a ser nubes, de lluvias bandidas.

Angelito…
de manos tersas y delicadas,
que contagian juventud,
hasta el mas viejo de mis recuerdos huecos.

¿Qué soñaras?
¿Será el frío pasado, que aun no vives?
¿el rígido presente, que te provoca llantos?
O ¿será quizás la niebla del futuro?

Trato de ver a través,
De la hendidura de tus ojos.
y solo encuentro un espejo.
Un espejo claro y tan húmedo como el agua.

Me encuentro conmigo mismo.
Viendo el color verde de mis ojos.

Tus lámparas traspasan las mías,
Hasta derretir mi pasado, y beberlo,
Como una taza de chocolate caliente.
Tan caliente que…quema mi lengua.

Mis palabras, pierden sabor,
Por la inocencia que ha extraviado mi razón.

Angelito…
Vidente del alma…
Mi alimento son las palabras, los gritos, los suspiros, las lagrimas…
Mientras tu gozas del alimento nato de tu madre.

Por ello tus ojos fijos,
No reflejan inconstancia en tu alma.
En fin…
Eres un océano complejo de la vida.
que así como el mar al sol,
Dices tus mejores consejos en silencio.

a veces pasa

A veces pasa.
Sucede que cuando me siento en la cama
Siento aletear los minutos por mis orejas
Vuelan como mariposas
Se llevan en sus alas mis recuerdos
Quien sabe a donde
No se a donde.
Solo se van sin avisar.

A veces pasa. Y podría decir que casi siempre
Intento juntar las mariposas antes que emprendan el vuelo
Sintetizar el dolor, el goce, la indignación y más
Sentimientos capaces de colarse en mis escritos.
Me creo el escribano de mis memorias
Y se llevan mis letras.
Una y otra ves pasa. Se las llevan en sus alas

A veces pasa que no paso ni un minuto despacio
Aunque cierre la ventana se escapan los minutos
Pero cuando esta abierta se van mas rápido.

Me gusta cuando hace frío
Casi no pueden aletear tan ágiles
Suelo aprovecharlas más de lo normal.
En un minuto puedo recorrer toda mi vida
Y escribir una frase que la resuma toda como:
“soy el cauce del río buscando agua” o
“soy el buscador de ojos en el cielo”

Pero lo que no a veces sucede
Es cuando lloro porque extraño
Las mariposas que se llevaron los minutos
mas débiles. Donde solo el creador me socorrió.